Vapor de agua

Aqui sigo, como siempre,
en la lucha diaria de compatibilizar
amor y libertad,
dos conceptos que a mi pesar
el ser humano hace antonimos.

Es dificil que ocurra algun milagro
especialmente porque jamas
he creido en Dios
aunque viviendo entre impostores
lo que si que existe es el infierno.

Quizas porque hacia lo que soñaba
sin aceptar las tablas de la ley
Buñuel ya lo anuncio:
la revolucion es dejarnos arrastrar
por el deseo, desnudar a la razon.

Y mientras el combate continua
yo sigo siendo el hereje
insatisfecho ante cualquier resignacion
sin encuadrar en ninguna etiqueta
probando todo aunque pueda envenenarme.

Tan solo tengo billete de ida
en este viaje en tren de alta velocidad:
aunque en cuanto puedo me detengo
y saboreo la oportunidad que, perdida,
no volvere a paladear.

Aqui sigo, como hasta ahora,
a palos contra la hipocresia cotidiana
intentando alimentarme en cada flor
que me ofrece el camino
porque sin su placer el tiempo es
vapor de agua.