domingo, 7 de octubre de 2007

Desiertos

DESIERTOS…


Corre el dromedario entre las dunas,

dromedario que conlleva el peso sumo

en su rabiosa mitad del subconsciente,

mitad que es podredumbre angelical.

¡ Galopa el dromedario en la evaporación sacra ¡



Es el final del desierto indefinido

Todo sube, vuela, el viento droga al polvo,

lo transforma en soles de proyección cerrada.

¡ El desierto se acumula en la garganta ¡



Danza el escorpión, dispuesto al ataque,

al baile del amor en espacios imposibles;

bebe el agua de sus labios, entonces mata,

actua su elixir, la carga atávica,

que el desierto aguanta en sus espaldas:

el peso sumo, la levedad girada,

la danza del amor envenenada,

la resurrección del agua...

No hay comentarios: