Reflexiones hacia Chinchon

Observamos los arboles pasar
mientras rodamos junto a los caminos
a la velocidad de la gasolina

De repente alguien dice
que se parecen demasiado a los humanos
salvo que no pueden caminar

Tras la reflexion comun,
concluimos que mas bien es al reves
en esta tierra que es un espejo

Los hombres a veces son
parecidos a los arboles, aunque sin vida
bajo la lapida de sus prejuicios.

Como mi semen entre tus labios

Las flores que crecen tras mi ventana
bañadas de rocio, se asemejan a ti,
empapada del sudor que te subraya.


Como la suave espiral entre tus muslos
de mi avida lengua de mariposa
en la búsqueda infatigable de alimento.


Como la piel voluptuosa de la manzana
cuando el cielo estalla a cantaros
y la vida se revuelve en primamera.

Como la arena con sal enmadejada
en el cóncavo vaiven de tu marea
y, entre tus dedos, dos gotas de miel:

Como mi semen entre tus labios