Toda esclavitud mata

TODA ESCLAVITUD MATA

Toda esclavitud mata.

La del trabajo que te transformá
en un autómata
ajeno a lo espontáneo.

La del afecto que exige
complacencia como moneda
de cambio.

La del sexo que te llena
de angustia
hasta dejarte vacío.

La de la comunicación
que te aleja de todos
tus silencios.

La de la famila que convierte
tu cabeza en estructura
maleable.

La de la autoridad que a cada paso
necesitaras
para decidir.

La del miedo que atrinchera
toda ilusión
y que deforma la esperanza.

La del apego por el que eres
banquero de tus sentimientos
intercambiables.

La de la propiedad inalienable
que nos hace blindar
nuestras ventanas al mundo
que vallemos todos los caminos
hacia la libertad.

Toda libertad resucita.