lunes, 19 de enero de 2009

Republica


Mis manos estan por todas las paredes
entremezclandose con las tuyas
manchando cada uno de los estantes
de la unica habitacion de nuestra casa
sobre las cajas, bajo las cortinas
donde dejas tus perfumes y las llaves
entre tu ropa personal y junto a la ventana
dentro del frigorifico y sobre el mando a distancia

Nuestras palmas colorean todo el espacio
desde el techo hasta el suelo, en los rincones.
Cada momento de amor deja una huella
un rastro de silencios y perversiones,
juego interminable que señala al futuro
con orgias continuas de politicas intimas,
en dactilares parlamentos que recitan anecdotas
de nuestra republica en ciernes

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