miércoles, 18 de mayo de 2011

No hace falta


No hace falta que me dispares de nuevo en el estómago
porque en realidad ya estoy muerto
encerrado en vuestros cementerios sin luna, sin encrucijadas,
hundiéndome a cada rato en las arenas movedizas
sobre las que construís los nichos que habitamos.


No hace falta que encarceléis a esas ovejas negras
que del redil intentan escapar
tarde o temprano acabaremos desfilando a vuestro paso
como robots programados para apenas respirar
como papagayos que repiten lo que otros dicen.


No hace falta que tomen las calles vuestros mercenarios
con los que creéis darnos miedo
El terror corre ya por nuestras venas hace otoños,
e intoxicados con vuestras mentiras cotidianas
no podremos creer mas en el paraíso terrenal.


No hace falta que de nuevo a balazos me acribilles
pues llevamos años en vuestras tumbas
en nuestras familias, en vuestro colegios, sobre estas calles
donde las leyes son la policia y los banqueros
donde todo está putrefacto, y los cimientos siempre amanecen
a punto de derrumbarse.

3 comentarios:

Émile dijo...

Forneo, leo tu blog sobre asuntos rumanos desde tiempo atrás, pero es la primera vez que entro en este sitio de poemas. Ya estoy leyendo varios de ellos. Me conmueve, en el mejor sentido de la palabra, la forma en la que viertes también de esta manera tu apertura hacia los demás seres humanos. Un saludo cordial.

Émile dijo...

Por cierto, vi que te hiciste seguidor de mi sitio "anti-Santi". Te informo que ese blog ya no lo voy a actualizar; todo lo nuevo que salga sobre "Santi" lo voy a añadir a http://santiagoalbarico.blogspot.com (me gustó más esta dirección, jeje, por obvias y malévolas razones). Si gustas hacerte seguidor, me honraría muchísimo.

Porthos dijo...

Grán belleza, pero en éste poema denoto un negativo oelín de derrotismo.
Salud.